Sin quererlo, dos jóvenes periodistas, Luis Palmero y Jaume Sanllorente, están demostrando con hechos que no hace falta ser Spiderman ni tener superpoderes para luchar contra las injusticias, para ayudar o proteger a personas indefensas. Uno en Venezuela, impulsando la Fundación Impulso Creativo. Otro en la India, fundando la ONG Sonrisas de Bombay. Ambos desbordan solidaridad, altruismo, generosidad, alegría... Y nos recuerdan los numerosos casos de profesionales de la Comunicación y del Periodismo que, a lo largo de los años, se esfuerzan a diario por combatir el mal con abundancia de bien. ¿Despertamos?
Reforzar los valores humanos
Primero nos trasladamos a Venezuela. Allí, Luis Palmero, tras acabar su carrera de Comunicación Social, trabaja en radio, produce contenidos audiovisuales, organiza eventos y con 24 años se involucra de lleno, junto con otros compañeros (comunicadores sociales, diseñadores gráficos, especialistas en medios audiovisuales, psicólogos o administradores de empresas) en un proyecto que nace en una barriada conflictiva de Caracas: la Fundación Impulso Creativo: "Somos un grupo de jóvenes venezolanos comprometidos con el crecimiento y desarrollo a través de los valores (...) Buscamos todos aquellos proyectos o iniciativas positivas que se llevan a cabo en el país, para conectarlos con la empresa privada interesada en invertir y posicionarse como un actor socialmente consciente. Nuestro trabajo se basa en el reforzamiento de los valores humanos como pilar fundamental para todo desarrollo. Y en la creación de campañas y comunicaciones que permitan hacer masivo lo positivo". Así lo explica el propio Luis Palmero en el siguiente vídeo:
Defensa de los derechos humanos
Vamos ahora hasta la India donde la vida de otro joven periodista, Jaume Sanllorente (Barcelona, 1976), da un vuelco cuando viaja de vacaciones a ese país. Esos días se encuentra con un mundo de pobreza y privación de derechos humanos que le deja impactado. A partir de entonces, después de haber trabajado en varios medios de comunicación, funda la ONG Sonrisas de Bombay, una organización que atiende a más de 5.000 personas y de 1.000 escuelas. Objetivo: transformar y mejorar sus condiciones de vida, además de denunciar las vulneraciones de los derechos y la exclusión que sufren muchos, tal y como relataba recientemente en una entrevista en Periodista Digital.
"La idea de crear la ONG surge en mi último día de un viaje de ocio en Bombay al ver la situación de 40 niños en un orfanato", explica Sanllorente. "Mi familia y mis amigos, aunque piensan que estoy como una cabra, me han apoyado en este proyecto de Sonrisas de Bombay (...) Fue un error vivir como un pobre para luchar mejor contra la pobreza, es como si un oncólogo va a ser mejor especialista si antes ha sufrido un cáncer", resalta.
"Periodistas locos y valientes"
También recordamos a otros periodistas que igualmente se han exprimido en la defensa de los valores y los derechos humanos, en comunicar y no silenciar las injusticias. Como Manuel de Unciti, sacerdote vasco, escritor y maestro de periodistas, que acaba de fallecer a los 83 años. Otro hombre entregado al Periodismo y al humanismo cristiano. O como los 30 reporteros que se encuentran en paradero desconocido en Siria. Entre ellos, los españoles Javier Espinosa, Ricardo García Vilanova y Marc Marginedas (desaparecidos desde septiembre). Es "El infierno del periodismo" que describía hace poco en un artículo nuestro compañero Ramón Lobo: "Sin noticias, la realidad deja de existir; no hay víctimas ni verdugos, solo un lejano ruido de fondo. Sin noticias pierden los civiles, los que todos proclaman defender. Desde septiembre hay orden de caza y captura de periodistas (...) Para ser conscientes de lo que sucede lejos de nuestro mundo más o menos confortable, para denunciar y señalar a los hijos de puta que asesinan civiles necesitamos a periodistas locos y valientes como Javier, Ricard y Marc y necesitamos medios locos y valientes que crean en el periodismo por encima de la cuenta de resultados".
Así lo resaltaba, igualmente, nuestra compañera Rosa Villacastín: "No debemos olvidar a quienes permanecen secuestrados y se juegan la vida por contar lo que otros callan (...) Estoy segura que tanto Javier, como Marc, como Ricardo, están preparados psicológica y físicamente para soportar lo que están viviendo. Una experiencia que les enriquecerá profesional y personalmente, porque ellos, como sus otros compañeros en cautiverio, saben que su misión es y seguirá siendo luchar para que se sepa la verdad de lo que está ocurriendo en lugares donde la guerra es cada día más sangrienta y opaca".
Todos ellos, y muchos más, actúan con heroicidad para servir a la sociedad de distinta manera. De una forma más real que los ficticios superhéroes de cómics o películas. Simbólicamente, lo comprobamos en este curioso incidente protagonizado por la reportera de televisión Sarah Haines, del programa "Good Morning America" de la cadena estadounidense ABC que, durante una transmisión con motivo del Año Nuevo en el Times Square cayó al suelo después de que un "Hombre Araña" no la sujetara al fingir un desmayo.Vea aquí el vídeo:
Todos ellos, y muchos más, actúan con heroicidad para servir a la sociedad de distinta manera. De una forma más real que los ficticios superhéroes de cómics o películas. Simbólicamente, lo comprobamos en este curioso incidente protagonizado por la reportera de televisión Sarah Haines, del programa "Good Morning America" de la cadena estadounidense ABC que, durante una transmisión con motivo del Año Nuevo en el Times Square cayó al suelo después de que un "Hombre Araña" no la sujetara al fingir un desmayo.Vea aquí el vídeo:
¿Y tú? ¿Esperas a que un Spiderman sea quien ayude a la humanidad? ¿O eres tú mismo el que defiende los valores y los derechos humanos allá donde nos encontremos? ¿Cómo lo ves? Anímate a comentar o compartir estas reflexiones. Además, te invito a suscribirte al blog en busca de un Periodismo y una Comunicación de valor, calidad y rentable. Hasta el próximo sábado, si Dios quiere... Y vuela alto.
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