Trabajar gratis por ser becario... ¿Es justo y digno o, más bien, un abuso? Una respuesta la descubrimos estos días en una sentencia ejemplar de los tribunales británicos: nueve grandes empresas han sido condenadas por “violar la legislación sobre los salarios mínimos” y deberán indemnizar con 230.000 euros a cientos de jóvenes licenciados que trabajaron para ellas sin recibir ningún tipo de remuneración. Eran becarios encubiertos que desempeñaban las mismas tareas que los demás compañeros de plantilla. Inaudito, pero real y, por desgracia, muy frecuente. Esta noticia debe despertar conciencias y, cuando menos, abrir un debate. No sólo entre las empresas, sino, ya metidos en nuestro ámbito de la comunicación, entre los propios dircom y los periodistas recién titulados, con el objetivo de frenar el intrusismo y las condiciones de miseria que se tornan crecientes en nuestra profesión.
¿Ahora los periodistas somos también reporteros gráfico y técnicos audiovisuales? ¿Estamos obligados? ¿Quién pone los límites? Lo califican de Periodismo moderno, pero el hecho es que quitan empleos: el periódico Chicago Sun Times ha despedido a sus 28 fotógrafos contratados, incluido un premio Pulitzer, John H. White, para seguir este nuevo modelo de redactor-fotógrafo. Este medio de comunicación estadounidense pretende que los periodistas entreguen junto a los textos un material audiovisual conseguido mediante el iPhone.
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Resulta evidente que vivimos una etapa económica extremadamente delicada. El agobio por encontrar o mantener un empleo puede generar situaciones extremas frente a las que debemos mantenernos en alerta, buscando siempre que se cumpla la legalidad, sin permitir explotaciones ni otros tipos de miserias o precariedad laboral. ZoomNews explica cómo las condiciones de vida y de trabajo de un periodista en 1995 son hoy una utopía, hasta el punto de que un periodista "junior" cobraba prácticamente lo mismo hace 17 años que en la actualidad. Hoy, la mayoría de los periodistas cubren ruedas de Prensa gastando dinero de sus propios bolsillos. Destacadas cabeceras y agencias de noticias españolas confirman que no pagan esos traslados de sus redactores.
Más sangría: sólo durante 2012, 70 medios de comunicación cerraron en España y 3.879 periodistas fueron despedidos, según el balance del Observatorio de la Crisis de la FAPE. José Antonio Sorolla, que fue director adjunto de "El Periódico de Catalunya" y redactor jefe en "El País" advierte: "El periodista se ve ahora obligado a ejercer de hombre orquesta: profesionales de prensa escrita tienen que escribir para la web, volcar el contenido, hacer la crónica para el papel, hacer los tuits... y todo a la vez". También el veterano periodista José Yoldi habla de que "la precariedad en el empleo es tan salvaje que permite a las empresas tratar a los redactores como si fueran empleados de una fábrica textil china".
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Tan sombrío panorama es terreno sembrado para los intrusos. Al margen de los y las "belenesestébanes" que invaden redacciones o estudios de radio y televisión, hay numerosos casos mucho más cercanos: como ese reputado restaurante de una capital de provincia que delega el mantenimiento de sus Redes Sociales no en un "community manager", sino en uno de sus cocineros "porque entiendo de esto" (según él mismo contestaba recientemente a un seguidor en Facebook); o esa asociación empresarial con cerca de 30 años de historia que contrata un programa en una cadena y lo modera no un periodista, sino... Un ingeniero. Etcétera, etcétera. Seguro que tú conoces más. ¿Acaso confiaríamos una operación de apendicitis, la revisión de un ojo, pilotar un avión, la defensa de un juicio o una instalación de gas a personas no cualificadas ni tituladas?
Igualmente, como decíamos, los directores de Comunicación podemos ser responsables de colaborar con esta plaga de intrusismo y miseria que azota el Periodismo. ¿Cuándo? Cada vez que aceptamos ejercer de hombres y mujeres "todoterreno" sin límite, diciendo a todo "ok" sin admitir apoyos que son necesarios. En cambio, aunque siempre tengamos que coordinar esas tareas, ¿no deberíamos delegar ciertos trabajos en los profesionales realmente especializados, insistimos, cualificados y titulados, como a la hora de diseñar o crear páginas web, planes o estrategias de Marketing y de Publicidad, etc.? Está claro que no vale todo. Y para combatir por un Periodismo digno, mejor unidos que no solos, como nos aporta este divertido anuncio de la compañía belga de autobuses "De Lijn".
Para acabar, una muestra del valor, la excelencia y rentabilidad que supone saber delegar un trabajo en los verdaderos profesionales. Este vídeo emotivo de Dove, puro arte ("¿El anuncio más viral de la historia?"), que rescatamos del blog del profesor de Comunicación Francisco Pérez Latre: un pintor retrata a mujeres según se ven a sí mismas y cómo otros las ven, mostrando lo bellas que son realmente.
¿Y tú? ¿Cómo retratarías a los dircom y periodistas de nuestros días? ¿Ves intrusos y miseria? ¿Qué opinas de los responsables y las soluciones? Anímate a comentarlo. Además, te invito a suscribirte para leer más reflexiones de actualidad en busca de una Comunicación Corporativa de valor, calidad y rentable. Hasta el próximo sábado, si Dios quiere... Y vuela alto.
Mientras te formas y amplias tus conocimientos, una y otra vez porque no hay trabajo y nunca es suficiente, te explican que las empresas necesitan un comunicador integral que englobe al periodista redactor, al gráfico, audiovisual y multimedia. Ésa es la idea y ésa es la realidad.
ResponderEliminarMi experiencia como becaria abarca más de dos años, antes y después de haber tenido un contrato laboral, tanto en medios locales como en regionales y nacionales. El trabajo era el mismo para mí que para el personal en nómina. No hay opción: o lo tomas, o lo dejas. Así de triste. Pero, como hay que mirar la situación de forma optimista, no hay mal que por bien no venga, y esar continuamente reciclándonos nos convertirá en profesionales muy completos, en aquellos que buscan. O eso espero.
Un saludo y enhorabuena por tu blog.
Lola Talavera
Muchas gracìas, Lola. Tienes mucha razón. Lo ideal sería que existiera un mayor control de las prácticas, más todavía cuando no son remuneradas. Perjudican tanto a quienes desarrollan la labor de becarios/as como a los profesionales que son despedidos o no son contratados para cumplir esas tareas. Además, deberíamos de unirnos a la hora de denunciar los casos de abusos, así como no permitir el intrusismo.
EliminarUn saludo, Lola, y te reitero mi agradecimiento por tu excelente aportación.
Excelente post Juan Carlos, retratas con gran fidelidad la realidad actual de los periodistas y la de muchos otros profesionales. Entiendo que los chicos recién titulados tienen que ejercer de alguna manera para ganar experiencia, pero no estoy de acuerdo en que lo hagan gratis, pues esta situación se convierte en una muy mala costumbre de las empresas para disminuir gastos de personal. Es necesario organizarse y exigir leyes que regulen la situación de los becarios y un salario mínimo para ellos, pues como tu bien señalas, por una parte es injusto para ellos y por otra perjudica a los profesionales que no encuentran trabajo porque sólo están buscando becarios. Adriana
ResponderEliminarExacto, Adriana. Es decisivo organizarse y exigir leyes que regulen esta situación, la pena: nos falta solidaridad. Muchísimas gracias por tu apoyo y por tan acertada opinión. Un saludo :)
ResponderEliminarMuy buen post, Juan Carlos. Soy dircom y estoy totalmente en contra de tener becarios no remunerados. Cada día veo ofertas de este tipo.
ResponderEliminarLa situación laboral en España ya sabemos como está pero las empresas no deben aprovecharse de esta situación. ¿Dónde está la tan aireada RSC?
Un saludo y sigue con tu blog. Es genial!
Haydée
Muchísimas gracias por tu apoyo y tu opinión, Haydée. Aciertas plenamente cuando dices que las empresas no deben aprovecharse y nuestro papel de dircom es abrir los ojos de esos directivos para que no cometan semejante error.
ResponderEliminarUn saludo y te reitero mi agradecimiento :)
Me parece un post de lo más acertado para los tiempos que corren hoy día. Soy defensora a ultranza del periodismo, sin embargo, el panorama de esta profesión no es que pase por su mejor momento. Para empezar, es de las profesiones peor pagadas en nuestro país y, para más inri, cada día se unifican un mayor número de tareas para este profesional. Como bien apuntas, su consecuencia más inmediata es el despido de miles de profesionales y la no especialización de tareas actuando todos como "personas orquesta". En relación al becario, acabo de terminar unas prácticas y la única diferencia que había entre el resto de trabajadores y yo era el tipo de contrato; ellos en nómina, yo de prácticas; las funciones a desempeñar eran exactamente las mismas. Un mayor control en este aspecto no estaría de más.
ResponderEliminarFelicidades por dicha entrada.
Muchísimas gracias por tan valiosa aportación, Sandra. Un cordial saludo.
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